El Blog de Rosa Magallón

15 abril 2013

Despedida, cierre,….y hasta luego.

Filed under: Uncategorized — Rosa Magallón @ 21:08

Hace ya varias semanas que no entro en el blog. Me da pereza. Es como si de repente, hubiera dejado de sentir la necesidad de escribir aquí, de comunicarme por este medio.

La noticia de la desparición del gran humanista Jose Luis Sampedro, esta misma semana, me ha dado un poco de energía para hacer desaparecer, de momento, mi presencia en este blog. Hace tiempo que quería escribir esta despedida. Espero recuperar las ganas y por eso es un hasta luego.

Mientras tanto, seguiré acumulando fotos, disfrutando de ellas, aunque Luis me manda pocas ultimamente. Probaré otras experiencias internauticas. Seguiré protestando, como no, y cada vez más, contra lo que nos está pasando.

Y, como decía, dice, mi admirado Jose Luis Sampedro, seguiré luchando por el derecho a la vida, a una vida digna.

Pero también por el deber  de vivir, intensamente, con fuerza, con energía, con ganas, con rabia muchas veces, con la utopía por horizonte…..

Hasta luego amigos, hasta siempre Jose Luis

 

img_JL_Sampedro_grande

 

 

20 enero 2013

La riada

Filed under: Uncategorized — Rosa Magallón @ 22:38

Como esta gentuza, que arrasan con todo y arrastran mierda por donde pasan.DSC04025

 

 

 

 

el roto enero 2013

 

 

 

10 enero 2013

La servidumbre no se acepta

Filed under: Uncategorized — Rosa Magallón @ 14:04

 

10 ene 2013

Luis García Montero

La crisis está disparando a la multitud. No pasa un día sin que nos encontremos con un amigo que se ha quedado en paro o que ha tenido que cerrar su negocio. No pasa una conversación sin que afloren los problemas de un hijo, un enfermo o un jubilado. La gente vive de forma inmediata su problema o su incertidumbre individual, pero tarda en tomar conciencia de la degradación colectiva de la sociedad. Asistimos a un desgarrón histórico grave, un giro de rumbo en el que derechos decisivos están siendo desmantelados.

¿Es culpa del sistema? La verdad es que vivimos en un sistema que nos empuja a la degradación. El capitalismo especulativo genera mucho dinero, pero acumulado en pocas manos. No crea riqueza para la gente común. Al contrario, su imperio depende hoy del paulatino empobrecimiento de la sociedad. El sistema desprestigia y desmantela las pensiones públicas para alimentar el negocio de las pensiones privadas. El dinero de las pensiones privadas se desvía a los fondos de inversiones, y son estos fondos los que se apoderan, por ejemplo, de multinacionales como Capio Sanidad. Lejos de ver la salud como un bien personal y social, las multinacionales sólo atienden a su negocio y someten la esperanza de vida de las personas a sus cuentas de resultados.

Este sistema es una cabronada, desde luego, y parece difícil imaginar hoy de modo racional una salida digna a la crisis sin una transformación profunda del dichoso sistema. Pero a la hora de exigir responsabilidades conviene ser flexibles, o sea, conviene entrar en destalles. Las culpas del sistema, con su fatalidad abstracta, no empequeñecen las responsabilidades de los gobiernos concretos, de los especuladores de carne y hueso y de los ciudadanos sometidos a la condición de siervos. La servidumbre no se acepta.

El sistema no podría marcar una vertiginosa degradación de los ciudadanos y negocios como Capio Sanidad no podrían jugar con la vida de las personas si no hubiese gobiernos dispuestos a privatizar la sanidad pública. Yo no entiendo otro patriotismo que el de los derechos civiles. Uno de los emblemas del patriotismo español ha sido para mí, además de la poesía y la vida nocturna, la sanidad pública. Si no hubiese gobiernos y partidos dispuestos a poner nuestra sanidad en manos de Capio, es decir, a poner en venta la nación, el sistema no estaría agrediéndonos con esta impunidad que disfruta ahora. Malditos sean los gobiernos de España y de la Comunidad de Madrid. Moverse hacia una estructura más cara y peor no es sólo culpa de un sistema. Es decisión de un Gobierno. La servidumbre no se acepta.

La vida nos condena a la busca. Todos tenemos que trabajar o que buscar trabajo. Pero hay trabajos y trabajos. Que existan fondos de inversiones dispuestos a hacer negocio con la salud de un país o a especular con los alimentos y el hambre, es muy propio de este sistema. Pero sería imposible la agresión que sufrimos sin empresas como Capio Salud o sin especuladores de carne y hueso. Malditos sean, no por el sistema al que pertenecen, sino por su complicidad concreta. La servidumbre no se acepta.

Y es que la complicidad de las personas es fundamental para que los especuladores hagan negocio y el sistema imponga su imperio. Complicidad al especular y complicidad por no defenderse, por aceptar las cosas con pasividad, por no pasar a la acción, por no imaginar alternativas cívicas y políticas que pongan freno a la rapiña. Nosotros también somos el sistema y las responsabilidades, aunque en distinto grado, están compartidas.

Escribo este artículo en un tono tan descarnado por dos motivos. En primer lugar, porque quiero hacer un homenaje a los profesionales de la sanidad madrileña que han levantado una marea blanca en legítima defensa no ya de su trabajo, sino de un derecho clave para todos nosotros. La sociedad debería corresponder con una movilización generalizada en su apoyo. La servidumbre no se acepta.

El segundo motivo es de orden literario. Algunos amigos -académicos, líricos o simples cortesanos-, me han aconsejado en los últimos tiempos que me aleje de la política. ¡Estoy demasiado comprometido! ¡Estoy manchando mi obra, mis poemas de amor! No tengo tiempo ahora de explicar lo cerca que siempre han estado a lo largo de la historia las camas de hospital y los lechos de amor. Por eso me limito a recordarme a mí mismo que San Juan de la Cruz, Quevedo, Jovellanos, Espronceda, Unamuno, Antonio Machado, Federico García Lorca, Rafael Alberti, Pablo Neruda o Miguel Hernández sufrieron torturas, cárceles, exilios o penas de muerte por su compromiso humano y político. Si yo no me siento inmortal, no es por mi cercanía a la política, sino por los versos que he escrito. Pero lo seguiré intentando. La servidumbre no se acepta.

31 diciembre 2012

Cuando las barbas de tu vecino veas pelar,…

Filed under: Uncategorized — Rosa Magallón @ 13:45

A pesar de las manifestaciones, huelgas, evidencias, oposiciones,….en madrid avanzan hacia la privatización de la sanidad a marchas forzadas.

Con unas declaraciones del Presidente y del consejero de sanidad que da pena,….los balbuceos constantes a la hora de mentir son patéticos.

Mientras unos se ganaban el sueldo no recortado jugando a los pasapalabra, ahí va la intervención y análisis de Ruben, nuestro diputado de Iu, contra la privativación mas descarada y desoladora
http://www.youtube.com/watch?v=PRt2ijSQAMo
http://www.youtube.com/watch?v=WZdVhbCzxd4

Mucho animo a nuestros compañeros y pacientes de Madrid. ¡Todos somos Madrid!!!!!

 

Terminó ya el trámite parlamentario de los Presupuestos de la Comunidad de Madrid para el 2013, y su Ley de Medidas Fiscales y Administrativas que lo acompañan, intensificando en nuestra región la apuesta clara del Partido Popular por la austeridad y el cumplimiento estricto de los objetivos de déficit público. Lo hacen sabiendo que las consecuencias de esta estrategia es pulverizar el Estado Social, las políticas sociales que cohesionaban de forma solidaria a nuestra sociedad. Y es que las matemáticas son exactas: si no hay un modelo fiscal justo y progresivo, ni un modelo productivo definido y el único reto es la austeridad, en el resultado de la ecuación sólo salen recortes de derechos sociales porque no hay dinero para sufragarlas. Es decir, la sanidad, la educación y los servicios sociales para quien pueda. Porque la administración no tiene recursos para prestarlos.

Esta última frase es la más recurrida por el PP para justificar sus contrarreformas y recortes, ahora que se ha cumplido un año del Gobierno de Mariano Rajoy. Utilizando los habituales eufemismos, las regulaciones llevadas a cabo en materia laboral, sanitaria, educativa y fiscal y justificadas como “medidas de ajuste”, “reformas”, cuando no “planes sostenibles”, no han servido más que para presentar indicadores económicos absolutamente insostenibles, crear más sufrimiento a los ciudadanos y, sobre todo, recortar una serie de derechos sociales que son inherentes a nuestra propia Constitución.

A golpe de Decreto-Ley, y bajo la coartada de la crisis económica, están llevando a cabo una acción de gobierno que supone una auténtica estrategia reaccionaria en todos los terrenos. Lejos de garantizar en este contexto político-económico el denominado Estado del Bienestar, sencillamente se está desmantelando.

Volviendo a Madrid, con estos Presupuestos, van a poner en marcha un plan sanitario que ya no supone el clásico recorte de partidas de gestión pública e incremento de transferencias a la iniciativa privada para que realice nuestra asistencia sanitaria. Este plan supone ya gestionar el sistema sanitario público en el marco de la privatización. La concesión a empresas privadas para la gestión total de 6 hospitales, en total serían 9, de los servicios no sanitarios del resto o de la Atención Primaria de 27 centros de salud, no es una colaboración público-privada. Llamemos las cosas por su nombre: es privatizar. Privatizar nuestro sistema sanitario público. Privatizar un derecho reconocido a todos los ciudadanos en nuestro ordenamiento jurídico, como es la Sanidad Pública.

El Gobierno Regional ha argumentado que este sistema es más eficaz y económico. Supongo que el Gobierno Regional no pondrá como ejemplo de eficacia el recién construido hospital de Collado Villalba y no puesto en funcionamiento, donde a la empresa concesionaria se le pagará 900.000 euros mensuales a pesar de no estar prestando ninguna asistencia sanitaria. O no pondrán como ejemplo económico un sistema de gestión de hospitales (PFI) que cuando termine el periodo de concesión de 30 años habrá costado hasta 7 veces más que si se hubiera construido y gestionado de forma pública. Supongo que no pondrán como ejemplo de calidad ante la posible situación laboral de los profesionales sanitarios que presten su asistencia en estos centros gestionados por una empresas que buscarán, como es lógico, y en primer lugar su beneficio económico. El Gobierno como responsable de dirigir la Administración, renuncia a gestionarla de forma directa. Curiosa paradoja para hablar de sostenibilidad. Más bien lo que se va a ayudar sostener es a empresas sanitarias que ya gozan de muy buena salud… económica.

Echando la vista a atrás, desde que presentaron el plan el pasado 1 de noviembre, la respuesta no ha podido ser más contundente. Jamás una medida ha unido tanto a un sector tan diversificado y heterogéneo como es la comunidad sanitaria, y ha concienciado a la ciudadanía en defender algo que es de todos. Todos los sindicatos de los profesionales y colegios de médicos salieron públicamente rechazar este plan. Todas las entidades sociales de la comunidad de Madrid han manifestado también su oposición. Los equipos directivos de 118 de 270 centros de salud públicos ya han firmado su dimisión. Igual que decenas facultativos miembros de comités técnicos de distintos hospitales lo han presentado en el Colegio de Médicos de Madrid. 3 mareas blancas han colapsado la ciudad de Madrid. Hasta el momento se han llevado a cabo 5 semanas de huelga en todos los centros sanitarios públicos. La Plataforma Asamblearia de Trabajadores y Usuarios por la Sanidad ya ha presentado un millón de firmas de rechazo. Hasta el mismo Gobierno de Rajoy ha mostrado su contrariedad a el Euro por Receta, un impuesto a la enfermedad que también viene en el paquete de este plan de sostenibilidad, sabiendo que hasta la base electoral del PP está manifestando su negativa a este escandaloso cambio de modelo.

Se han quedado solos. Están solos. Nadie defiende su plan de desmantelamiento de la sanidad pública. Solamente es amparado por un partido, que dentro de su delirio neoliberal, no ha visto límite en privatizar el sistema de protección pública a la salud que ha sido una de las señas de identidad de nuestro país y respetado por todos y por todas.

La última declaración del Presidente madrileño, Ignacio González, es que ante las 40.000 consultas canceladas y las 6.000 operaciones pospuestas por la huelga de empleados sanitarios, “los médicos no operan porque no quieren, así de claro”.

Unas declaraciones fruto de la soledad y salvaguardadas en una mayoría absoluta que le permiten llevar a cabo este cambio de modelo. Pero lo que no se dan cuenta es que son unas declaraciones que unen, cada vez más, a profesionales sanitarios y ciudadanía en unas movilizaciones que no pararán hasta conseguir el objetivo de detener este grave ataque a nuestra sanidad y a nuestra democracia.

26 diciembre 2012

Asterix contra las privatizaciones.

Filed under: Uncategorized — Rosa Magallón @ 10:01

Asterix ya era un iluminado de su tiempo,…

Se puede decir mas alto, pero no más claro,….

Mucho ánimo a los compañeros de Madrid en su lucha contra esta sinrazón.

ASTERIX CONTRA LAS PRIVATIZACIONES

 

 

23 diciembre 2012

Paz

Filed under: Uncategorized — Rosa Magallón @ 21:50

 

PAZ para los crepúsculos que vienen,
paz para el puente, paz para el vino,
paz para las letras que me buscan
y que en mi sangre suben enredando
el viejo canto con tierra y amores,
paz para la ciudad en la mañana
cuando despierta el pan, paz para el río

(…)

paz para el panadero y sus amores
y paz para la harina: paz
para todo el trigo que debe nacer,
para todo el amor que buscará follaje,
paz para todos los que viven: paz
para todas las tierras y las aguas…..

Pablo Neruda

Gracias Isabel por esas presiosas felicitaciones

16 diciembre 2012

Transformar

Filed under: Uncategorized — Rosa Magallón @ 10:04

La movilización en organización
la rebeldía en alternativa
y la alternativa en poder

Poder para transformar la realidad

10 diciembre 2012

Carta a los Reyes Magos

Filed under: Uncategorized — Rosa Magallón @ 12:54

Mi buen amigo Juan Gervas ha escrito una carta a los Reyes, que os transcribo

 

Queridos Reyes:

 

Os escribo para avisaros de que Palestina está que arde. Arde lo que llaman los Territorios Palestinos (como si el territorio de Israel no fuera Palestina). Cada vez es más peligroso cruzar el Muro de Israel. Andad con cuidado cuando os acerquéis, que tienen todo lleno de controles y disparan sin avisar. Avisan a bombazos (con fósforo blanco, uranio empobrecido, bombas de racimo y plomo en abundancia) y en lo que llaman Territorios Palestinos matan más niños que Herodes.

 

Ni se os ocurra preguntar a las autoridades de Israel por el NiñoQueSeRebelaráContraLaOpresión, que entonces son capaces de tirar una de las 400 bombas atómicas que tienen (desde un submarino alemán financiado en parte por Alemania-Unión Europea, que los alemanes todavía no se han querido enterar de que Israel continúa con su Muro la tradición del Muro de Berlín, que siguió la de las alambradas de los campos de exterminio nazi). Ahora que lo pienso no irán a tirar una bomba atómica tan cerca; en eso los Territorios Palestinos están más seguros que la Unión Europea (excepto, quizá, Grecia, que también les cae demasiado cerca).

 

En todo caso este año el Niño no ha nacido en Belén, por culpa de la resistencia de sus padres, que defienden a los palestinos (en Israel y en el resto de Palestina). A su padre lo han detenido (pero no torturado, que para eso es judío), y a su madre la tumbaron de un culatazo de forma que el parto ha sido prematuro (todo ha ido bien). Además, los colonos les han arrancado los olivos y las bombas destruyeron la casa que habían alquilado en los Territorios Palestinos. Este año el Niño sí ha nacido en un portal. En soledad, con un par de cabras de testigos en un día de frío abrasador. Luego llegó el pastor (durante el parto estuvo haciendo de «caganer» involuntario, de forma que en algo pareció aquello «un belén» típico) y le dio de beber agua a la madre, limpió un poco todo y envolvió al niño en su manta y tras él se sumó toda la comunidad (nadie sabe cómo se corrió la noticia, pero no fue por «las redes sociales»). La reunión terminó a tiros, «disuelta» por los soldados de Israel, con dos muertos, por no haber pedido permiso. La madre y el Niño acabaron a la fuerza en el hospital de Shifa, sin necesidad. Allí los encontraréis, esperando en las urgencias (la madre se negó a disfrutar de los privilegios que conlleva ser judía).

 

Andad con cuidado, si os ven con las pintas que lleváis de persas terminaréis también acusados de terrorismo y torturados, como sospechosos de pertenecer a Al Qaeda. Aunque no lo parezca os puede pasar lo mismo en medio mundo. Ser rey mago ha dejado de ser un honor de facto y es fácil que os traten como a los ricos en Utopía, pero ahora por miedo al Otro, no por desprecio al dinero. Pretenden que construyamos una Utopía al revés, sin solidaridad, con miedo a todo y a todos.

 

Si lográis cumplir vuestra misión en Palestina no dejéis de pasar por España. Aquí también es la guerra, de los ricos contra los pobres. Hay legiones de desahuciados, pobres, hambrientos, vagabundos involuntarios, marginados, desempleados y angustiados. Impresiona sobre todo la pobreza infantil, el desamparo de los discapacitados dependientes y el abandono a su suerte de los inmigrantes anteriormente explotados. Que vuestra presencia al menos les haga conscientes de su fuerza y de su dignidad. Campa la corrupción como el cieno en el fondo de los pantanos. En «Transparencia Internacional» nos sitúan ya en el puesto 30, con Botsuana (a Chile y Uruguay en el puesto 20, para que os hagáis una idea). No hay guantes blancos para tanto ladrón de etiqueta.

 

Os esperamos en Madrid, en el valle del Lozoya, en Canencia de la Sierra. Ya sabéis que mis sobrinos viven todos allí. No creen en los Reyes Magos (ya son mayores y siempre fueron descreídos) pero agradecen igual los regalos. Son buenos, doy fe. Sobre todo, son solidarios, como toda su familia. La situación está que arde, hasta quieren quitar el helicóptero. Sí, el que me llevó a mí cuando me resbalé en el Puente Canto y me rompí la tibia y el peroné, que se me quedaron los huesos saliendo como cuchillos al traspasar un jamón.

 

El médico pasa con frecuencia por casa de mis sobrinos (¡ojalá que no tuviera que venir nunca!).Ya sabréis que mi cuñada ha tenido cáncer de colon, la operaron este verano y todo se ha complicado. Lo primero fue el estreñimiento que no le gustó nada al médico. Después las pruebas, que ahora la lista de espera desespera más que nunca (por los recortes, o «reformas», como se diga). Al final terminó en urgencias, atascada hasta vomitar mierda. De allí al quirófano. Pero mal, con los recortes no hay personal, hay menos material y menos servicios y la calidad ha bajado lo que no os podríais creer. Un hospital nuevo, el Infanta Sofía, pero se notan los recortes. Tanto como en el centro de salud (el de Espronceda) que limpio a lo largo de la semana, en Madrid. No lo llaman recortes, es de coña, lo llaman reforma o «externalización». Te miran tan serios como aquel que miraba a la cámara cuando lo de Irak y decía muy engolado, mintiendo a conciencia: «Créanme, Saddam tiene armas de destrucción masiva» y que ahora escribe en contra de Palestina, quizá para hacernos olvidar las cinco chicas muertas que cuelgan de la espalda de su mujer, la alcaldesa de Madrid (Arena). Terrible es lo que me contaron cuando estuve en Prádena (Segovia) a ver a la madre de mi mejor amiga, que una pobre inmigrante se pasó dos meses ingresada en el hospital porque le habían negado el tratamiento para lo suyo («miastenia grave») al no tener papeles y al final se murió .

 

El caso es que a mis colegas los están llevando a la desesperación, con los sueldos recortados, les han quitado la extra de Navidad, han eliminado los días moscosos, no hay formación, se recorta la investigación, a los pobres residentes los explotan más que nunca, hacen contratos hasta por horas, los suplentes en el centro de salud parecen fantasmas (dicen que existen pero no los vemos y cuando vienen se transparentan, por lo mal que comen). Hablan de privatización, pero piensan en corrupción. La corrupción nos va a terminar saliendo por la boca como la mierda a mi cuñada. Los médicos jóvenes tienen tres salidas en España, «por tierra, mar y aire», dada la falta de perspectivas profesionales y por el asco ante el olor nauseabundo de tanta basura bancaria, empresarial y política.

 

Los que matan la solidaridad, la educación, la sanidad y la ilusión de los españoles son sanguinarios. Aplican con saña sangría tras sangría. Es lo de «¡más madera!». ¿Más paro? pues más reforma («reforma», ¡qué ironía!) laboral y más paro. ¿Problemas con la sanidad pública? pues venta a cachos de lo rentable a los amiguetes y a dejar pudrir el sistema a base de recortes («reformas», perdón). ¿Hay que mejorar la educación pública? pues financiamos a tope la privada y que los pobres tengan una formación de esclavos pobres. No respetan nada, hasta los viejos con copagos como muletas imprescindibles para medicamentos, efectos varios, ambulancias y otros servicios y ahora ilegalmente sin el aumento de la pensión que les corresponde. Los pobres viejos temen que les quieten las extras, como han hecho con mis colegas, y hasta temen perder la pensión.

 

Mienten con cinismo. Ni Herodes fue tan taimado. Es una pena, tienen por dios verdadero al dinero y a los banqueros, especuladores y mafiosos por jefes. Emplean a los policías para combatir contra el pueblo y no dudarán en emplear al Ejército pues no se paran en barras (ya lo hizo el PSOE, ¡cómo no lo va a hacer el PP!).

 

Ya os habréis imaginado lo que me pido por reyes, ¿no?. Para uso civil. Y no para mí. Que lo necesitamos, que ya sabéis lo que son estos montes en invierno con la nieve y en verano con los atascos por los veraneantes.

25 noviembre 2012

paisajes de aquí y de ahora

Filed under: Uncategorized — Rosa Magallón @ 22:37

Y experiencias,….

hoy, despues de mucho tiempo, he aprendido a descargar las fotos del movil en el ordenador. ¡Bien!!!!!

y me he encontrado con mis últimas fotos de paisajes disfrutados, en los últimos meses.

Que los disfruteis!!!

A ver si adivinais de donde son????

13 noviembre 2012

Quiero una Huelga

Filed under: Uncategorized — Rosa Magallón @ 21:55

Poema Huelga de Gioconda Belli

Quiero una huelga donde vayamos todos.
Una huelga de brazos, piernas, de cabellos,
una huelga naciendo en cada cuerpo.

Quiero una huelga
de obreros de palomas
de choferes de flores
de técnicos de niños
de médicos de mujeres.

Quiero una huelga grande,
que hasta el amor alcance.
Una huelga donde todo se detenga,
el reloj las fábricas
el plantel los colegios
el bus los hospitales
la carretera los puertos.

Una huelga de ojos, de manos y de besos.
Una huelga donde respirar no sea permitido,
una huelga donde nazca el silencio
para oír los pasos del tirano que se marcha.

 

Página siguiente »

Crea un blog o un sitio web gratuitos con WordPress.com.